En este nivel de nuestras conversaciones sentí la curiosidad de
leer algo sobre conjuros, rituales, hechicerías, brujerías, etc, ya lo había
hecho sobre los dones paranormales, pero necesitaba profundizar en estos otros
temas buscando descifrar a mi amiga, ¿Quizás era una Hada azul como la de
Pinocho o era una persona piadosa con ciertas facultades sobresalientes pero
dentro de lo normal? o ¿Una bruja mala como la de la Bella Durmiente?.
Al abordar estos temas no podemos obviar al personaje ficticio, aprendiz de estas ciencias del ocultismo, el famoso Harry Potter y sus experiencias en el Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería, narradas en una serie que constituye uno de los libros más vendidos en el mundo y traducida a por lo menos sesenta y cinco (65) idiomas, un ejemplo clásico donde podemos adentrarnos al mundo de la magia y sus enseñanzas.
La práctica de estos ritos provocaron la muerte de muchas personas
en la época de la inquisición y del oscurantismo, como el caso de las Brujas de
Salem, un juicio contra diecinueve (19) vecinos, todas mujeres, y su posterior
condena a muerte en la hoguera, al ser relacionadas con la brujería o
hechicería, pues estaban prohibidas por las clases religiosas. Pronunciar estas
palabras en el pasado evocaban lo oscuro, lo perverso, su simple uso denotaba
algo maligno, por supuesto nada más diabólico que una mujer y sus conjuros
cotidianos para lograr ser obedecida por niños rebeldes, controlar un marido
infiel y hasta dominar animales desparramados en el campo, imagen típica de una
bruja en acción.
Un conjuro o maleficio es una fórmula con la que se pretende
realizar diversos actos mágicos para obtener un fin deseado, coloquialmente
conocido como hechizo, invocando una Divinidad o una fuerza sobrenatural para
pedir su intervención. Los conjuros se
forman mediante una serie de frases o palabras mágicas, siendo supuestamente
más poderoso si se hacen en latín o en griego. Existen conjuros muy conocidos,
tal como el famosísimo “Abrakadabra” que no necesita traducción, por ser
universal. Generalmente se le añade a continuación la frase “patas de cabra”,
resultando “Abrakadabra, patas de cabra”, usado para lograr conseguir objetos
perdidos. Otro es el también popular “mal de ojo”, que se materializa con solo
mirar a la persona mientras se piensa en el deseo. Para deshacerlos se le rezan
unas oraciones, se usan amuletos o talismanes con el fin de alejar las
malas energías y protegerse del mundo espiritual. En algunos casos extremos el
maleficio amerita un exorcismo.
Dentro de los amuletos se destacan las cintas de color con un
coral o un cuerno colgado de la muñeca o tobillo, el Ojo Turco o el ojo azul de
cristal, la Mano de Fátima, la piedra de Amatista considerada trasmutadora de
energías negativas; también están el Ámbar o «Piedra del Sol» que se cree posee
propiedades místicas o mágicas que por su origen misterioso era apreciado como
protección contra diversos daños para el portador de esta, considerada
beneficiosa para el chakra del plexo solar y con afinidad con los signos de Virgo, Géminis y Leo.
Con respecto a esto, hace varios años atrás, más de los que quiero
recordar, viví la siguiente experiencia: cursando mi carrera en la Universidad,
una tía residenciada en Dinamarca, un país nórdico de tradiciones célticas me
regalaría un dije con un ámbar, usándolo parte de mi vida universitaria, sin
conocer su significado místico, esta piedra me condujo a un extraño suceso. El
caso es que al participar en una reunión con un grupo de docentes, a la que
asistimos ciertos estudiantes entre los que me encontraba, en el transcurso de
la misma siento algo extraño, como un llamado telepático a mi mente, noto que
uno de los profesores me observaba fijamente y al mirarlo “responde” fijando su
mirada en el ámbar que llevaba colgado a mi cuello, instintivamente lo cubro
con un suéter que cargaba puesto pero abierto, e inmediatamente lo abotono. Al
terminar la reunión el profesor se me acerca preguntándome porque llevaba esa
piedra, a lo cual le respondí que era un simple adorno, y salí huyendo de allí,
sin volver a usarlo nunca más. Nuevamente lo gnóstico tocaba a mi puerta y yo
evadía el destino. Tiempo después, el ámbar estalló, entonces pensé que había
sido fortuito, hoy me doy cuenta que no fue así y que mi tía danesa, conocedora
de los poderes gnósticos del ámbar, de las dificultades a las que me enfrentaba
por mi condición de minusválida retando al mundo conservador al estudiar medicina
y que además soy del signo zodiacal Leo, evidentemente me lo regaló para mi protección.
Karla me escucha y al terminar, a su vez, me contaría su historia con
un médium que vino a la ciudad a dar una conferencia, por estar interesada en
los temas a debatir decide asistir; durante el desarrollo de la misma le
realiza una pregunta que él no le contestó. Al terminar la charla, ella lo
esperó fuera del salón, exigiéndole una respuesta, a lo cual él alzando la mano
y apuntando con su dedo índice a su abdomen, específicamente a la región del
ombligo, le lanza un conjuro diciéndole que en las próximas 48 horas tendría lo
que buscaba. Me contaría que debido a ciertos malestares que se generalizaron,
intuyendo que era producto de las energías negativas recibidas, desde el
momento de la amenaza, había estado pidiendo la protección de los ángeles
guardianes. A continuación le sucedieron una serie de hechos peligrosos
relacionados con automóviles, chocó el suyo, luego otro casi se la lleva por
delante, finalizando a las 48 horas con un accidente donde un carro la golpeo
lanzándola al suelo pasando sus ruedas por una de sus piernas, resultando con
varias fracturas que la mantuvo en cama por un poco más de un mes y en
rehabilitación por casi un año. Este conjuro no llego a ser mortal, gracias a
que sus rogativas fueron escuchadas, siendo protegida en varias oportunidades
durante ese lapso de tiempo, incluso se le apareció un ser a quién ella en un
principio confundió con un médico del hospital, diciéndole que no sería
necesario operarla y sanaría totalmente. Posterior a esto caería en cuenta que en
realidad se trataba de la presencia de un ángel.
En vista de esto, para aclarar el tema que nos compete, nada mejor
que sumergirnos en el personaje de Merlín, por ser el clásico Mago de la luz que
habita en el imaginario colectivo, en contraposición al diabólico o malvado,
generalmente representado por una mujer vestida de negro, como por ejemplo la
malvada Maléfica, quien hace dormir cien años a la dulce princesa del cuento de
hadas al cumplir quince años.
Merlín de origen inglés, de la misma tradición celta que Harry Potter, considerado como el más poderoso hechicero que vivió en la época del Rey Arturo, capaz de hablar con los animales, de hacerse invisible, de controlar el clima y también de cambiar de forma, diferente a lo que conocemos como mimetismo que es una habilidad de un ser vivo de parecerse a otro. Lo que ocurre con estos seres, conocidos como un cambiante o cambiaforma, es que se tratan de criaturas humanas, animal o ser sobrenatural, que puede pasar de una forma a otro ser vivo, gracias al uso de poderes mágicos. Esta idea de cambio de forma ha estado presente en la literatura, en la mitología y el folklor desde tiempos inmemoriales. Es muy conocido como los dioses del mundo antiguo castigaban a seres vivos, humanos o dioses, cambiándolos a animales, por ejemplo el Príncipe convertido en sapo. En la ciencia ficción de hoy día este poder es prácticamente obligatorio, con la diferencia de que el cambio de forma se logra gracias a la tecnología acabando con la magia. En la saga Crepúsculo, un clan de vampiros que también son capaces de cambiar a hombre lobos, fenómeno conocido como licantropía.
Merlín llevo este poder de los cambiaforma a un nivel extraordinario,
por lo que se llegó a creer que servía a las fuerzas de la oscuridad. Pero esto
no era cierto, todo lo contrario fue un guía espiritual, un sabio maestro, un
chamán, un profeta que jugó un papel clave en la vida del Rey Arturo, como mago
bueno: "Conocía la esencia de todas las cosas, su transformación y su
renovación, conocía el secreto del Sol y de la Luna, las leyes que rigen el
curso de las estrellas en el firmamento; las imágenes mágicas de las nubes y el
aire; los misterios del mar. Conocía los demonios que envían sueños bajo la
Luna. Comprendía el grito áspero de la corneja, el volar cantarín de los
cisnes, la resurrección del fénix. Podía interpretar el vuelo de los cuervos,
el rumbo de los peces y las ideas ciegas de los hombres, y predecía todas las
cosas que sucedían después." Este hermoso pasaje permite conocer los
poderes de este Mago.
Se cuenta que al llegar a la vejez, conoció a una bella y joven
doncella, de nombre Nimue, hija del rey de Nothumberland, por quien perdió la
cabeza, enamorándose frenéticamente, comenzando a enseñarle conjuros secretos
de un gran poder a cambio de que se convirtiera en su amante. Debido a que
Nimue se enteró de los rumores de que Merlín era hijo de un demonio, comenzó a
Por esto ella planifica la forma de obtener de Merlín, bajo engaño,
la información de una fórmula para atrapar a un hombre, el accede y le enseña
el secreto de cómo lograrlo, aplicándole el hechizo logra encarcelarlo para
siempre en el tronco de un árbol del que no podía marcharse, pero la mujer si
podía entrar y salir cuando quisiera.
A mi entender, esta imagen metafórica de Merlín dentro del árbol, que viene a ser el Árbol de la Vida, al formar parte de él, nos señalaría que todos podemos dominar la hechicería, los conjuros, realizar viajes astrales, atravesar portales, simplemente descubriendo sus secretos, adentrándonos dentro de su tronco o columna vertebral, no en vano catalogado por la Iglesia Católica como el Árbol del Conocimiento o del Bien y del Mal, cuyas enseñanzas prohibidas representadas por las manzanas que al comerlas dan origen a la muerte en el Paraíso, el pecado original que nos aleja de la Verdad, evitando lograr obtener una conciencia superior que nos conduce a ser hombres perfectos, como dioses.
Esta investigación me sirvió para concluir que existieron personas
con facultades extraordinarias, que no eran estafadores, al contrario, eran
estudiosos y muy profesionales, posiblemente tal como Karla, pero aún
continuaba sin responder mi pregunta ¿Quién era realmente ella?.
No hay comentarios:
Publicar un comentario